El presidente Alberto Fernández encabezó en San Miguel de Tucumán el acto central por la conmemoración del 205° aniversario de la Declaración de Independencia, donde reiteró las disculpas hacia Bolivia tras haberse conocido el apoyo que el gobierno de Mauricio Macri le brindó al golpe de Estado contra Evo Morales en 2019, criticó a la oposición por su rol en la pandemia y ponderó la campaña de vacunación.
Fernández dedicó el primer tramo de su discurso al escándalo por el envío de armamento a los golpistas bolivianos de parte del gobierno de Mauricio Macri: “Quiero pedirle disculpas al pueblo de Bolivia porque un Gobierno argentino haya mandado armamento para parar la protesta de un pueblo que se levantaba contra un Golpe militar”.
En esa línea, recordó que “en unos días, el 12 de julio, conmemoramos el día de la hermanad entre Bolivia y Argentina y lo hacemos porque ese día coincide con el natalicio de Juana Azurduy”, y agregó: “es casi irónico que tengamos que enfrentar el día de la hermandad entre la Argentina y Bolivia con semejante locura”.
El presidente también hizo un repaso cronológico hasta la firma de la independencia y afirmó que «la historia se repite y hoy hay muchos que no quieren que seamos libres y soberanos y siguen pensando en patria para algunos». Y en tren de seguir marcando las diferencias tanto con el gobierno que encabezó Mauricio Macri señaló:
«Mi modelo no está en los que mandan balas de goma a Bolivia, mi modelo siguen siendo San Martín, Güemes y Belgrano. Nunca esperen de mí que firme algo que arruine la vida del pueblo argentino».
El coronavirus y la vacuna
Alberto Fernández también aprovechó el acto para remarcar que la Argentina «tiene otras batallas» como la pandemia del coronavirus, y cuestionó a «los que se enojan cuando cuidamos el ingreso de los argentinos al país» para retrasar la llegada de las nuevas variantes del virus, como la Delta.
«Es un virus perverso que no para de mutar. Algunos se enojan cuando cuidamos el ingreso de los que llegan a la Argentina. Cuidamos que el virus que muta no ingrese y nos complique otra vez la situación, cuando estamos logrando avanzar rápidamente en el proceso de vacunación», dijo el mandatario y agregó: «¿Alguien pude pensar que yo puedo estar feliz con tantas limitaciones? Es el tiempo que nos tocó. Si nos unimos, si entendemos que nadie se salva solo, si entendemos que además de ser libres e iguales debemos ser fraternos y solidarios con el otro, todo va a ser más fácil».
El jefe de Estado mostró su esperanza sobre el avance de la vacunación: “El año que viene, millones de argentinos van a estar en las calles de sus pueblos celebrando el 9 de Julio porque vamos a estar inmunizados. Más del 40 por ciento de la población que se puede vacunar ya han recibido por lo menos una dosis».
Horas antes de encabezar el acto en Tucumán, el Presidente publicó un mensaje en las redes sociales. «Este Día de la Independencia celebramos el esfuerzo de cada uno y cada una que, con trabajo, mantiene vivo el legado de los héroes de la patria. Estamos cerca del mañana que queremos. Un mañana en el que recuperemos la alegría y sigamos reconstruyendo nuestra querida Argentina», expresó el mandatario en el video en el que se mezclan distintos momentos de la pandemia de coronavirus y la campaña de vacunación en diferentes partes del país.
Con su voz en off en el material audiovisual, el Presidente señaló: «Debemos tomar conciencia de que no solo celebramos un hecho del pasado, que recordamos con monumentos, con homenajes. Celebramos el esfuerzo de cada argentino y cada argentina que día a día trabaja por que seamos cada vez más independientes y así mantiene vivo el legado y el amor por la patria que nos dejaron».
En otro material audiovisual, publicado por el ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, en su cuenta oficial de Twitter, Alberto Fernández manifestó: «Yo quiero que este 9 de julio para todos sea la inyección de fuerza que todos los argentinos necesitamos para ponernos de pie».
«Todos estuvimos de acuerdo desde Jujuy, allá en el norte, hasta Tierra del Fuego, allí en el sur. Desde Mendoza al oeste, hasta Buenos Aires acá en el este. Entendimos que no había un dilema. Que lo que teníamos que hacer era preservar la vida y la salud de la gente”, agregó el mandatario con voz en off en este video.
Respueta a Máximo Kirchner
«Nunca esperen de mí que firme algo que arruine la vida del pueblo argentino, nunca. Espero que me entiendan, porque si alguien espera que yo claudique ante acreedores o laboratorios se equivoca, no lo voy a hacer, antes me voy a mi casa”, aseguró el presidente Alberto Fernández desde Tucumán en medio de su discurso por 205º aniversario de la Independencia. De esta manera el primer mandatario recogió el guante que le arrojó el titular del bloque del Frente de Todos Máximo Kirchner durante el cierre de la sesión informativa en la que el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero brindó su informe de gestión el último jueves cunado puso en duda la firmeza del Ejecutivo para negociar con los laboratorios que elaboran las vacunas de uso pediátrico contra el coronavirus. (Ver aparte en sección Economía)
En ese contexto, Fernández señaló la Casa Histórica de Tucumán y sentenció: “No tendría cara para entrar a esa sala (por la Casa Histórica) si hiciera algo semejante”,
Mensaje para la oposición
En otra parte de su discurso, el jefe de Estado criticó el rol de la oposición en el marco de la pandemia: «Hicieron una enorme campaña para hacerle creer a la gente que la vacuna era veneno y no sé dan cuenta el daño que hicieron».
En ese sentido, aseveró que, de esa manera, «hicieron daño y postergaron el proceso de vacunación» contra el coronavirus. Y añadió: «El odio nos nubla, nos hace ser injustos y dañinos. No nos damos cuenta que el odio siempre vuelve».
Por otro lado, habló sobre las negociaciones con Pfizer y explicó que «le dijeron que tenía un problema ideológico con la empresa americana mayor proveedora de medicamentos», pero que el objetivo era «defender los intereses de la Argentina». «Si alguien espera que claudique ante los acreedores o ante un laboratorio se equivoca. Antes me voy a mi casa», resaltó.
«Todos los días peleo contra los que quieren ver la Argentina arrodillada. Que no nos confundan más. Somos un país extraordinario con un pueblo maravilloso. Tenemos la puerta de salida que es la vacunación. No voy a parar hasta que esté vacunado el último argentino. El país que nos merecemos vamos a construirlo entre todos aunque algunos insistan en dividirnos», concluyó.
Fuente: Página/12
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