Los aspirantes opositores criticaron la política de movilidad municipal. El oficialismo insistió con profundizar los cambios. Quieren fortalecer el sistema de transporte público.
A seis días de las elecciones, los candidatos a intendente se cruzaron al exponer sus ideas para ordenar el caótico tránsito de Rosario. Hubo al menos una coincidencia: los problemas estructurales sólo se solucionarán con una mejora sustancial en el transporte público, para que más rosarinos se sumen a los colectivos y usen menos el auto particular. Mientras tanto, coincidieron, deben dilatarse las medidas restrictivas para la circulación en el centro. En paralelo se mencionaron distintas propuestas novedosas, que de aplicarse transformarán la movilidad.
En ese sentido, la gestión socialista va por más carriles exclusivos, más bicisendas, zonas calmas en esquinas céntricas, y la construcción de la avenida de la Segunda Ronda: una nueva Circunvalación que permitirá vincular a Rosario, Granadero Baigorria, Ibarlucea, Funes y Pérez.
Desde el Frente Renovador, Alejandro Grandinetti promueve construir cocheras en la barranca del parque Urquiza, en base a un estudio efectuado por la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). El ingreso sería por avenida Belgrano, una vía de rápido y fácil acceso.
El PRO pretende aplicar sistemas inteligentes de tránsito en las principales calles y avenidas, y analizar la implementación de carriles reversibles en avenidas principales, para privilegiar el transporte público, apuntando a disminuir sensiblemente los tiempos de viajes.
El PJ propone flexibilizar parte de las restricciones aplicadas por el municipio como las prohibiciones para doblar en carriles exclusivos a los autos particulares y cerrar cocheras «chicas».
Relegada en la agenda electoral por la problemática de la inseguridad, la temática de la movilidad casi no fue mencionada por los aspirantes a gobernar la ciudad los próximos cuatro años.
Pese a ser un tema de exclusiva competencia municipal, y aunque el nivel de conflictividad del tránsito se incrementó notablemente en los últimos años, el tema pasó desapercibido en la campaña.
Consultados por LaCapital, los equipos técnicos de los cuatro candidatos a intendente con mayor representatividad se explayaron sobre las políticas para el transporte, los autos particulares y la movilidad no motorizada.
Los cuatro aspirantes a la Intendencia coincidieron que el eje de la política de movilidad pasa por potenciar el transporte público, para que más rosarinos se suban al colectivo y dejen de usar tanto su auto particular. Entre los tres candidatos del arco opositor, hubo especiales cuestionamientos a la gestión socialista a quien le adjudicaron responsabilidad directa por esa situación.
«En la última década la ciudad tuvo un incremento del 67 por ciento de su parque automotor alcanzando los 700 mil vehículos. Este es el principal motivo por el cual Rosario se encuentra colapsada y el casco céntrico se torna intransitable», opinó Grandinetti.
«Rosario tiene un índice de motorización de 345, calculados como la cantidad de vehículos cada mil habitantes. Esta cifra es preocupante si se la compara con otras realidades latinoamericanas como la de Buenos Aires (320), San Pablo (230) o Bogotá (100)», apuntó Ana Martínez.
Para Sukerman, «el verdadero ordenamiento vehicular de la ciudad se va a producir con un transporte público de calidad, acompañando de otras medidas: cocheras subterráneas en puntos estratégicos, carriles exclusivos en avenidas que generen fluidez, ampliación de la capacidad de cocheras mediante líneas de créditos, red de ciclovías integrada».
El edil del PJ planteó que «debe haber coherencia en las medidas, aplicarlas con consenso entre los actores involucrados, no poner parches y hasta revisar algunas medidas. Tal vez haya que flexibilizar algunas prohibiciones como no doblar en carriles exclusivos y cerrar las cocheras de menor tamaño».
Propuestas. La subsecretaria de Movilidad de la gestión Fein, Mónica Alvarado, enumeró varias medidas ya en ejecución y otras en carpeta que el Ejecutivo proyectó en la materia.
Al respecto recordó que desde octubre de 2014 se encuentra en el Concejo el pliego licitatorio del nuevo sistema de transporte, con tarifa horaria y recorridos barriales, distritales y de enlace.
Además, se acaba de lanzar la tarjeta sin contacto MOVI, para pagar viajes del colectivo, estacionamiento medido y bicipúblicas. » Proponemos extender este sistema de pago electrónico al servicio de taxis», anunció.
El socialismo propone más carriles exclusivos, el primero sobre avenida Alberdi, ya licitado, mejoras en los accesos e insiste con la obra para eliminar la doble vía las avenidas Mendoza y Eva Perón para hacer más fluido el tránsito en el corredor este-oeste.
Además se apunta a efectuar la avenida de Segunda Ronda: nueva avenida de Circunvalación permitirá vincular a los municipios de Rosario, Granadero Baigorria, Ibarlucea, Funes y Pérez.
Y finalmente, avanzar con zonas calmas donde se prioriza al peatón en parte del centro como ya se hizo en el entorno del teatro El Círculo.
Desde el PRO plantean sistemas inteligentes de tránsito en las principales calles y avenida. Y analizando la implementación de carriles reversibles en avenidas principales, para privilegiar el transporte público.
Grandinetti apuesta a construir cocheras en la barranca del parque Urquiza, en base a estudios de la UTN. «El ingreso sería por Belgrano que es una vía rápida, no tiene impacto ambiental por la altura que tiene la barranca y por el contrario pueden pensarse en salidas peatonales a calles como Necochea».
La discusión por el nuevo sistema de transporte
Las críticas de los candidatos opositores también fueron duros con la propuesta del nuevo sistema de transporte. Esto presagia un debate complejo del pliego licitatorio en el Concejo. La iniciativa está en el Palacio desde octubre de 2014. Por ahora sólo se analizó superficialmente en la comisión de Servicios Públicos.
«El sistema propuesto en el nuevo pliego a licitar, no termina de mejorar el sistema actual, al no generar una verdadera conexión entre distintas zonas que hoy en día no están conectadas, solo incluye nuevos recorridos, pero sigue concentrando la mayor cantidad de recorridos en el área central», opinó Sukerman.
En la misma línea, el PRO planteó que «hay que establecer un mejor sistema de conexión interbarrial. Hay que crear nuevos recorridos que garanticen accesibilidad y conectividad, buscando líneas que no confluyan en la zona céntrica, generando sistemas de trasbordo que agilicen y otorguen calidad al servicio».
Grandinetti postuló la «necesidad de implementar un sistema alternativo de transporte, subterráneo o elevado como una alternativa ineludible».
FUENTE: AGENCIA FE
Más historias
El tren volvió a 79 localidades por las que no pasaba: 3 millones de personas conectadas
Elecciones en Rosario: los barrios que le dieron la victoria a Pablo Javkin y los de Juan Monteverde
«La escuela pública es una fábrica de futuro»