El precandidato a concejal del Frente Justicialista para la Victoria propone la creación de 100 comisarías y 30 fiscalías. “Lo que necesitamos es una nueva Policía, con control social y conducción política”, dijo el dirigente del Movimiento Evita.
Eduardo Toniolli proviene de la agrupación Hijos, es diputado provincial, secretario general de la departamental Rosario del Partido Justicialista y se postula a concejal en la lista que lleva como candidato a intendente a Fernando “Chino” Rosúa. Para “el Edu”, como lo conocen los militantes del Movimiento Evita, uno de los más graves problemas de la ciudad es la inseguridad, pero no cree que el mismo se arregle por medio de soluciones mágicas: “Lo que necesitamos es una nueva Policía, con control social y conducción política”, y para ello plantea la iniciativa de crear 100 comisarías y 30 fiscalías en Rosario. Y ya presentó, dice junto al resto de los candidatos de su lista, el mapa de esa estrategia institucional.
—En la práctica, ¿cómo se llevaría adelante esa propuesta?
—Partimos de la base de contar con una nueva Policía, que esté al mando del intendente, cercana a los vecinos, con la mirada y la exigencia de esos vecinos puesta en esa fuerza, que deberá saber que es controlada por la sociedad y conducida políticamente por el municipio.
—¿Cómo evalúa la gestión socialista en la materia?
—Como dice el Chino (Rosúa), el socialismo siempre dice que está haciendo las cosas maravillosamente bien y que, en ese sentido, va a seguir en el mismo camino. No hay por qué creer que no vaya a insistir, pero sabemos que los hechos cotidianos, que son los que sufre el vecino y la vecina de la ciudad, demuestran que es inevitable cambiar.
—¿Y el resto de la oposición, hay otros caminos diferentes al que ustedes plantean para mejorar la seguridad ciudadana?
—Quien más, quien menos, todos saben que es necesario combatir el delito, pero a la hora de las soluciones concretas y razonables, éstas son escasas. Y no hay que olvidarse de quienes sugieren importar modelos de lugares que no tienen nada que ver con la realidad rosarina.
—¿Cuáles serían los detalles del proyecto que sostienen?
—La prioridad es que la Policía opere bajo la conducción y el control de los vecinos, por medio de un mayor número de comisarías con jurisdicciones más pequeñas. El intendente, el representante más directo de los ciudadanos, debe tener la potestad de nombrar y remover los comisarios. En segundo término, sumar 30 fiscalías barriales que funcionarán con efectivos de la Policía Judicial exclusivamente abocados a investigar y recolectar pruebas que garanticen la desarticulación de las bandas delictivas. Es un modelo más eficaz que el actual, porque se maneja y coteja información de cada zona, con presencia más directa de funcionarios judiciales.
—También debería existir un trabajo social, ¿verdad?
—Indudablemente. Se trata de poder retomar los espacios públicos para la vida en comunidad, de poder ofrecer a los pibes horizontes distintos al del delito y la muerte violenta. Creemos que debemos dar una mayor protección a los derechos que tienen esos chicos, adolescentes y jóvenes a tener una vida digna, estar menos estigmatizados y dejar de sufrir la violencia institucional.
El precandidato a concejal del Frente Justicialista para la Victoria cierra la entrevista con una reflexión: “Hay que respaldar y fortalecer a las organizaciones sociales, a quienes trabajan en la prevención de adicciones, a los clubes que convocan al deporte y el esfuerzo colectivo, a los promotores de expresiones artísticas y culturales. Hay que apoyar y sostener los servicios de salud y la educación, la formación, la capacitación laboral. Sin esa acción, no hay seguridad completa para todos y todas”.
FUENTE: EL CIUDADANO
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