ROSARIO: «La realidad se lleva puesta cualquier ideología»

La candidata del PRO en Rosario habló  sobre sus planes para gobernar la ciudad.

Anita Martínez ganó popularidad como modelo y conductora de TV hasta que en el 2013 se lanzó como primera candidata a concejal del PRO. Reniega de “la burocracia” que implica la dinámica del Concejo Deliberante, en donde no se la vio cómoda. Con un estilo menos atrevido que el que usaba cuando brillaba en televisión, ahora disputará la intendencia de Rosario. Recibió a LPO apenas llegaba de Bilbao, donde fue a interiorizarse del modelo de gestión de esa ciudad.

Hace años que lo venía pensando, más allá de ser concejal. Hemos formado un equipo humano que quiere cambiar la realidad de Rosario. Eso hizo que mi compromiso haya ido mucho más allá de querer ser intendenta, porque quiero trabajar para resolver los problemas de la ciudad. Reciclar, rever y reutilizar todo lo que tenemos para trabajar de manera más equilibrada, para que podamos vivir en paz y seguros. Necesitamos una ciudad a la altura de las circunstancias y recuperar ese orgullo rosarino que tenemos y que está anestesiado por la situación que nos toca vivir.

Te vuelvo a hacer la pregunta: ¿Qué te moviliza íntimamente a decidir ser candidata a intendenta luego de haber pasado dos años en el Concejo?

Porque pienso mucho en los hijos, pienso en mis hijos y en los hijos de los demás que van a ser adultos el día de mañana. Quiero una ciudad que el día de mañana les dé oportunidades, que los una, que los haga crecer. Que les dé una oportunidad de elegir si quedarse o no, y no huir de la realidad. Quiero una ciudad donde los jóvenes estén orgullosos de ser rosarinos, de que puedan estudiar, realizarse, cumplir sus sueños.

¿Considerás que hay muchos rosarinos que no se quieren quedar en su ciudad?

La realidad nos atraviesa todo el tiempo. Hay un quiebre sociológico tremendo. El hecho de que hoy tengamos 110 asentamientos de forma ilegal en la ciudad hace que mucha gente que quizás estaba bien, hoy esté mal. Otras que han venido en busca de oportunidades. Ha crecido mucho Rosario y más allá de que hay problemas que vienen de hace 20 años, hoy no está a la altura de las circunstancias. Es complejo lo que estamos viviendo. Tenemos que hacernos cargo y ver de qué manera podemos trabajar para transformarlo.

¿Mónica Fein no ocupa el lugar que tienen que ocupar como intendenta?

(Silencio) Es complejo. Hoy por hoy no. No nos representa.

Decías que hace 20 años que Rosario arrastra problemas. Coincide con las gestiones socialistas en la ciudad…

Son realidades. Son formas de trabajar y son distintas formas de ver la ciudad. Nosotros cuando recorremos los barrios nos damos cuenta de la falta de inversión que ha habido en los últimos 20 años. Cuando uno anhela una ciudad limpia, segura, donde uno puede tomarse un colectivo sin miedo y que no te descuenten el presentismo porque llegaste tarde por culpa del caos vehicular, no te sentís representado. Querés que lo que pagás de impuestos lo veas en obras, servicios, cuestiones naturales que una intendenta o una municipalidad tienen que cuidar. En los últimos años, el deterioro de los barrios es cada vez mayor. Lo que estaba bien hecho quizá no se mantuvo, no se mejoró. Aparte, si ves que las instituciones y dirigentes, en vez de trabajar por el bienestar de la gente tienen negocios particulares, como es el caso de las vecinales, ahí te das cuenta de que algo está fallando.

¿Hay vecinales que tienen negocios privados?

Los mismos vecinos se encargan de contarte qué es lo que sucede. Hay una vecinal en la zona sur de la ciudad, en Puente Gallegos, donde era un lugar abierto a toda la gente que pagaba una pequeña cuota y tenía actividades o médicos y odontólogos, como ocurre en otras vecinales que son ejemplos. Sin embargo, en muchos otros casos no abren sus puertas a los vecinos. Entonces te das cuenta que son familias que terminan tomando ese edificio como si fuese una casa y no lo abren a la comunidad. Los mismos vecinos se cansan y muchas veces quieren recuperar esos lugares como nos ha pasado en barrio San Francisquito donde hace más de 15 años que no existe más la vecinal. Los mismos vecinalistas denuncian estas falencias.

Los problemas más acuciantes son el narcotráfico y la inseguridad: ¿Qué puede hacer el intendente desde su lugar?

Mucho. Yo creo que cuando vos te haces cargo del rol que ocupás, sabiendo la realidad que tenés y teniendo mucha gente que te ayude para formar muy buenos equipos para ver de qué manera podemos solucionar todos los problemas, sabiendo que el horizonte es que la ciudad esté mejor, que los ciudadanos estemos bien, se puede trabajar.

¿Cómo comenzó el narcotráfico?

Si vos me preguntás quién fue o qué fue, es imposible decírtelo. Pasó porque dejaron que pase y si los que dejaron que pase no tienen en sus manos las herramientas para solucionar los problemas, es muy difícil que sepamos nosotros realmente cómo empezó. Lo que sí sé es que se desmadró. Decían –el oficialismo- que era una jugada de los medios de comunicación. Pero la verdad, nosotros estuvimos con especialistas a través de la Fundación Pensar, que en su momento dieron una charla en la UAI –Universidad Abierta Interamericana- gente que trabajó muchísimo tiempo en Colombia sobre el narcotráfico y nos decían: ‘si acá no se toman decisiones políticas que tienen que ver con la seguridad, que se interrelacionen los tres poderes y los tres niveles del estado, de esto no se sale’. Lo único que vimos fueron parches, donde la discusión pasa por si había 800 o mil efectivos de Gendarmería y la realidad es que ya se fueron. Mucha gente en los barrios necesita que Gendarmería esté.

Vamos a suponer que sos elegida intendenta y el 10 de diciembre asumís, ¿cuál sería la primera medida orientada a la inseguridad?

Hay que empezar a decir que estamos trabajando para la seguridad. Inseguridad tenemos. ¿Qué queremos? Seguridad. No es un eje de campaña, en realidad es lo que queremos trabajar. Por eso me acompaña como primer concejal Gabriel Chumpitaz, él es experto en seguridad, hace más de veinte años que se viene capacitando en esto. Colaboró con todos los gobiernos y distintas instituciones.

¿Pero cuál sería la primera medida?

Entendemos que tenemos que tener en el presupuesto municipal anual una partida que sea de seguridad. Hoy por hoy, no la tenemos. Cuando vos tenés recursos, los hacés trabajar en conjunto y lo hacés eficientemente, podes invertir. Punto número dos, crear la Secretaría de Seguridad. Hay que invertir en los barrios e infraestructura. Si vos tenés barrios y podés transitar por la calle, servicios y luminarias como corresponde, poda y escamonda para que no se tapen las luces, son cuestiones de la cotidianeidad que van ayudando.

El presupuesto lo aprueba o rechaza el Concejo. ¿Han solicitado desde el PRO la incorporación de una partida especial para seguridad?

Sí, siempre

¿Cuál fue la respuesta del municipio?

Vos nunca vas a ver en el presupuesto lo que es seguridad. Hay un presupuesto direccionado a lo que es la GUM –Guardia Urbana Municipal- o Control Urbano, pero nosotros tenemos que tener un presupuesto de seguridad. Tenemos que hacer eficientes los recursos con los que contamos. Nuestro bloque presentó un proyecto para unificar la Guardia Urbana con Control Urbano porque hacen las mismas cosas pero en distintos horarios. Tenemos que reordenar todos esos recursos y todos vayan a una misma dirección. Para nosotros la seguridad es vital.

Otro de los puntos cuestionados de la actual gestión son los controles. ¿Cómo ves el desempeño del Municipio?

Si vos tenés que esperar tres años para que vengan a podarte las ramas del árbol de la puerta de tu casa… la vida de las personas se va esperando el progreso. El progreso serían las cloacas, un buen sistema de agua, el pavimento definitivo, el cordón cuneta. Te das cuenta que a la gente se la va la vida esperando eso, las cosas no están bien. Vemos que el transporte es ineficiente, que en los últimos diez años involucionó, algo está pasando. Hay muchos recursos en la ciudad de Rosario. Pero tiene que haber decisión política de poner gente competente a cargo de cada secretaría. Nosotros no hablamos de inclusión sino de integración. Cuando vos integrás a todos los ciudadanos y le devolvés en servicios todo lo que paga, yo creo que la gente te va a responder y hoy estamos cansados en poner, poner y poner y ver que el progreso está acotado a un solo sector de la sociedad. Queremos que Rosario se distinga por el progreso y el turismo, y no que aparezca en los medios por los homicidios que ya estamos superando el uno y medio por día en lo que va del año. La gente de afuera te pregunta: ¿che, pero qué pasa en Rosario con el narcotráfico?

¿Cómo debe ser el trabajo desde el municipio con los otros niveles del Estado, tanto provincial como nacional?

Tiene que ser fluido y constante. Tenemos que estar todo el tiempo en contacto, no te podés juntar una vez al año, esto va mucho más allá del signo político. Hay una gran realidad que la tenemos que empezar a comprender ahora, que los ismos nos han dividido y estamos como estamos. El tema de ser peronista, de ser radical o socialista, o tener una ideología, hoy por hoy la realidad se lleva puesta a cualquier ideología y se lleva puesto a cualquier futuro. Si realmente queremos tener una ciudad a futuro, tiene que ser fluido y sincero y dejar que la política sea un negocio personal. La política tiene que estar al servicio de la gente, para eso nos vota.

¿Cómo es tu relación con Miguel del Sel?

Muy buena. Es un tipo súper honesto. Vos lo mirás y se le ve el alma en los ojos. Recorre la provincia como pocos lo han hecho y lo único que quiere hacer es laburar y en ese contexto tratamos de ir combinando y congeniando porque él va a estar en la provincia y yo voy a estar en Rosario.

¿Y con Jorge Boasso?

Genial.

Pero no te fue difícil al principio, cuando no compartían el mismo espacio…

No, para mí nunca fue difícil. En realidad para mí esto no es una pelea personal.

Pero en el Concejo, Boasso fue muy hiriente con el PRO en más de una oportunidad

Si él se ha sentido herido, creo que hoy por hoy, ha subsanado cualquier situación. Jorge es uno de los concejales que más ha laburado en el Concejo, tiene infinita cantidad de proyectos de los cuales muchos, lamentablemente, no se han ejecutado. Es un tipo al que no podés objetarle sus años de carrera. También tiene su personalidad, porque es un tipo muy sanguíneo, el te dice lo que piensa, lo que siente. Es una persona con la que te podes sentar a charlar y en ese concepto, era una unión necesaria porque teniendo a Jorge como candidato a vicegobernador, conociendo los problemas de la ciudad como él los conoce está bueno. La gente nos dice, bueno che, están laburando. Nos juntamos porque necesitamos juntar equipos con lo que nosotros consideramos los mejores.

Con Mauricio Macri tenés muy buena relación, eso se vio cuando visitó Rosario…

Si, es una relación muy sincera. Es una relación que ha ido creciendo en todo este tiempo. Yo viajo a Buenos Aires y nos juntamos, también participo de muchas capacitaciones y todos sus equipos técnicos están a disposición. No solo con él la relación es excelente sino con todos sus ministros

¿Macri te eligió para que seas la candidata del PRO en Rosario?

(Silencio prolongado) No, yo quise serlo.

Lo pensaste…

(Risas) Yo me dije, tengo que llegar a más para poder resolver los problemas de la realidad y para ver la ciudad que yo añoro a futuro. Estando arriba de todo sé que vamos a poder avanzar muchísimo. Como concejal tenemos las manos atadas. Podes hacer mucho por los barrios, presentar muchos proyectos, muchas minutas de comunicación, reclamar, pero siempre quedás acotado a que el Ejecutivo te lo cumpla. Acá yo quiero cumplirla como Ejecutivo y quiero trabajar para eso. Pero más allá que yo tenía ganas, fue una decisión que tomamos en equipo y Mauricio siempre estuvo de acuerdo y se puso a disposición

El PRO está atravesando un crecimiento importante. Muchas veces, ello implica sortear algunas crisis, sectores que entran en contradicciones o dirigentes relegados. ¿Esto ocurrió en Rosario?

No, no, para nada. Las discusiones que tenemos siempre son poniendo al ciudadano primero por sobre todas las cosas. Quiebre no hubo, hubo mucha más unión. Antes de que hubiese solo tres concejales, cuando asumimos Charly Cardozo y yo, nos hicimos más homogéneos, no nos entran balas y trabajamos en equipo de una manera extraordinaria.

Sin embargo, el candidato natural del PRO para la intendencia era, para la opinión pública, Roy López Molina quien terminó encabezando la lista de diputados provinciales. ¿Cómo fue el entramado de esa negociación?

No hubo ningún entramado. Se fueron dando las circunstancias como para que cada uno vaya ocupando el lugar donde se sentía más cómodo y así se fue dando. Roy llega a ser diputado provincial porque entendemos que el PRO está creciendo en Rosario, está creciendo en Santa Fe y a nivel nacional, también es muy interesante que haya representantes de la ciudad de Rosario en la Legislatura como para poder defender nuestros derechos. Roy tiene una capacidad impresionante, es un animal político. Respira política, respira gestión. Roy no tiene techo, como decimos en la política. Tenerlo en la Legislatura, es un descanso.

¿Cómo viviste estos dos años en el Concejo Municipal?

Bien, muy bien, súper activos, más allá de que el Concejo tiene estas limitaciones que a veces a mi me han frustrado como persona, el hecho de ir a un barrio, presentar un plan integral de seguridad como lo hicimos en su momento con la gente que vive en la zona de Mendoza y Paraná donde nos juntamos con los vecinos durante cuatro meses…

¿Te molestaba la lógica Legislativa?

Me jode la cuestión administrativa, la burocracia. Me molesta porque los vecinos tienen urgencias y esa urgencia, lamentablemente, el Concejo no las soluciona porque siempre dependés de las comisiones para que te den despacho o del Ejecutivo. Es una burocracia que para mi entorpece mucho el accionar del concejal.

Pero es el lugar institucional del Concejo…

Por supuesto, así tiene que ser, pero creo que también corresponde el rol de cada uno poder activarlo un poco más y no estar tan pendientes de la rosca. Lo que más me gusta es la comunicación con la gente y poder cumplir mi rol. Si presentas un proyecto, que se cumpla y decirle a los vecinos: lo pudimos hacer.

Miguel del Sel tuvo apreciaciones parecidas respecto a la Cámara de Diputados, él renunció para hacer campaña, ¿vas a hacer lo mismo?

A mi todavía me queda un año como concejal.

A Miguel como diputado también…

Si bueno, pero él ya renunció y asumió Luciano Laspina. Yo entiendo que mi lugar, hoy por hoy sigue vigente y lo voy a seguir defendiendo y lo voy a seguir manteniendo. Después veremos que hacemos más en equipo, pero por lo pronto voy a seguir trabajando, seguir las visitas. El lunes arrancamos la comisión de Salud de la cual soy presidenta y no la voy a dejar. O sea hay situaciones que superan lo que yo pueda pretender como persona.

¿La renuncia de del Sel entonces es una decisión personal?

Es una decisión netamente personal, sí.

FUENTE: LPO

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